¿Qué Hablas?
Voy a seguir pensando que la vida es una broma incluso cuando no me da nadita de risa. Admiro a las personas que tienen una personalidad tan fuerte como para no dudar nunca de si están caminando en el rumbo correcto. Los admiro y les temo. Mejor dicho, temo por ellos, porque estar totalmente convencidos de algo, sin que ni la sombra de una equivocación se cole por un pequeño resquicio, bueno para eso hay que ser valiente...o muy cabeza dura.
Me pregunto de qué les viene esa disciplina, esa fortaleza, esa convicción. Me pregunto si es que en algunas noches se les presentará el maligno angel de la duda y los hará temblar al menos un poquito. Me pregunto y me respondo: Sí, probablemente pero su ideología es más fuerte. ¿Estarán mal? ¿no es un poco peligroso depender tanto de algo que va más allá de nosotros mismos? Y, sin embargo ¿no terminamos todos dependiendo de una cosa u otra a lo largo de nuestras vidas? Comida, sexo, profesión, relaciones sociales y un largo etc. Talvéz es mejor, ya que somos una especie destinada a la dependencia, apegarnos a algo bueno.
Me preguntó y me respondo (de pura chinche) : ¡que no! ¡que no! y ¡que no!. Que si de algo no voy a dudar es de que existo ( poniendome cartesiana) y que del resto la única regla es el cambio. La imperfección viene de adentro y se proyecta hacia afuera. Aunque en realidad no sé de que imperfección hablamos cuando nada es ideal...lo que sea que eso signifique. Voy a ir por todos los caminos y constancia no va a ser mi compañera, pero no importa prefiero ser feliz antes que ser exitosa.
A propósito, esto dijo en una reciente entrevista nuestro premio Nobel de literatura:
"Muchas veces, cosas en las que crees firmemente terminan siendo farsas, así que no hay que forzar la realidad, eso termina provocando mucha violencia. Es mejor no tener totalmente construida la ideología ni las convicciones, aceptar la posibilidad del error. "
¿Y tu en qué crees?